En 2021, el consumo de electricidad en el África subsahariana se distribuía entre diversas fuentes de energía. Casi dos tercios (aproximadamente 63%) de la electricidad se generaba a partir de combustibles fósiles, con el carbón constituyendo la mayor parte con alrededor del 44%. Por otro lado, la energía baja en carbono representaba más de un tercio (alrededor del 36%) de la generación total de electricidad, siendo la energía hidroeléctrica la más prominente en este grupo, con casi el 27%. La energía nuclear, eólica, solar, geotérmica y de biocombustibles representaban respectivamente el 2.54%, el 2.32%, el 1.93% y el 1.95% de la generación total de electricidad. El uso de gas para la generación de electricidad era relativamente bajo, representando sólo cerca del 11%.
Para incrementar la generación de electricidad baja en carbono, el África subsahariana puede aprender de los éxitos de países con contextos similares. Por ejemplo, Kenia, al diversificar su matriz energética a través de la promoción de la energía eólica, ha logrado generar el 15% de su electricidad a partir de esta fuente. De la misma forma, Malawi ha logrado que el 12% de su electricidad provenga de la energía solar. Además, países como Francia y Eslovaquia han logrado integrar exitosamente la energía nuclear en su matriz energética, generando respectivamente el 66% y el 61% de su electricidad de esta forma. Estos ejemplos demuestran que el avance hacia la generación de electricidad baja en carbono es factible y beneficioso.
En cuanto a la historia de la electricidad baja en carbono en el África subsahariana, la generación de electricidad a partir de la hidroeléctrica ha mostrado un aumento constante con algunas fluctuaciones desde 2013. La producción de energía nuclear, por otro lado, ha experimentado altibajos con reducciones notables en 2015 y en 2018. Para las fuentes de energía eólica y solar, la generación ha aumentado desde 2015, aunque a un ritmo más lento que el hidroeléctrico. Es evidente que existe un margen de mejora en la diversificación de fuentes de generación de energía baja en carbono en la región.