En Guinea Ecuatorial, la generación de electricidad en 2023 está dominada principalmente por combustibles fósiles, representando casi el 69% de la producción total, con el gas constituyendo la mayor parte de este segmento. La energía baja en carbono, en particular la hidroeléctrica, contribuye con casi una tercera parte de la electricidad. Esta dependencia significativa en los combustibles fósiles, especialmente el gas, resulta preocupante debido a los problemas ambientales asociados, como el cambio climático y la contaminación del aire. Sin embargo, es notable que la totalidad de la producción de energía baja en carbono provenga de la energía hidroeléctrica, lo que resalta el potencial para futuros proyectos de expansión en este sector.
¿Está creciendo la electricidad en Guinea Ecuatorial?
La tendencia actual de consumo de electricidad en Guinea Ecuatorial muestra un decrecimiento, evidenciado por la reducción del consumo total de 850 kWh por persona en 2023, comparado con el récord de 928 kWh por persona en 2016. Esto representa una disminución de casi 80 kWh por persona. En cuanto a la electricidad baja en carbono, también hay un descenso desde el récord anterior de 323 kWh por persona en 2015 a 265 kWh por persona en 2023, lo que indica una caída de aproximadamente 60 kWh por persona. Este estancamiento en el crecimiento y la reducción en el consumo son preocupantes, especialmente en un contexto global donde se necesita más electricidad, y más aún energía limpia, para impulsar un desarrollo sostenible y contrarrestar los impactos negativos de la dependencia de combustibles fósiles.
Sugerencias
Para incrementar la generación de electricidad baja en carbono, Guinea Ecuatorial debería considerar adoptar y adaptar algunas prácticas exitosas de otras regiones. Países con una alta contribución de energía nuclear como Francia y Eslovaquia, que generan más del 60% de su electricidad a partir de esta fuente, son ejemplos a seguir. Asimismo, estados como Iowa o Dakota del Sur, donde la energía eólica provee más de la mitad de la electricidad, demuestran el potencial de las energías limpias. La expansión de la energía solar también debe ser una prioridad, inspirándose en regiones como Grecia y España. Esta diversificación en la mezcla de fuentes de energía baja en carbono no solo ayudará a reducir la dependencia de los combustibles fósiles, sino que también contribuirá a una mayor estabilidad y seguridad energética en el país.
Historia
Históricamente, la generación de energía baja en carbono en Guinea Ecuatorial, específicamente la hidroeléctrica, ha sufrido cierto estancamiento desde principios de los años 90, con un aumento limitado únicamente a principios de la década de 2010. Durante esta última década fueron notables algunos incrementos en la generación hidroeléctrica entre 2012 y 2015, sumando un total de 0.4 TWh, solo para luego estabilizarse nuevamente en 0 TWh de crecimiento anual a partir de 2017. Este patrón subraya la necesidad urgente de implementar estrategias más agresivas para expandir la capacidad de energía limpia y asegurar un suministro energético sostenible para el futuro. La falta de desarrollos significativos en las últimas dos décadas es una llamada a la acción para mejorar las políticas y las inversiones dirigidas al desarrollo de la infraestructura energética baja en carbono.