En Texas, actualmente, el consumo de electricidad está mayormente dominado por los combustibles fósiles, que representan más de la mitad de la generación total, con un 64%. Dentro de este grupo, el gas es la fuente principal, contribuyendo con aproximadamente el 52%. En cambio, aproximadamente un 36% de la electricidad proviene de fuentes bajas en carbono, que incluyen energía eólica, solar y nuclear. La energía eólica tiene la mayor participación entre estas fuentes, con un 22%, mientras que la solar y la nuclear contribuyen con aproximadamente un 7% cada una. Es fundamental recordar la importancia de aumentar la participación de estas fuentes limpias para reducir la dependencia de las combustibles fósiles y mitigar sus impactos ambientales negativos, como el cambio climático y la contaminación del aire.
¿Está creciendo la electricidad en Texas?
El consumo de electricidad en Texas está mostrando un crecimiento, como se observa con el aumento en el consumo per cápita. En 2024, el consumo alcanzó los 18,017 kWh por persona, superando el récord anterior de 2023 que fue de 17,811 kWh por persona. Esto representa un incremento de 206 kWh por persona. Además, la generación de electricidad baja en carbono también ha experimentado un crecimiento, alcanzando 6,558 kWh por persona, lo que implica un aumento de 351 kWh en comparación al año anterior. Este crecimiento en la generación limpia es alentador, aunque sigue siendo necesario seguir expandiendo significativamente estas fuentes para satisfacer la demanda creciente de electricidad y avanzar hacia un futuro más sostenible.
Sugerencias
Para aumentar la generación de electricidad baja en carbono en Texas, se pueden considerar varios enfoques. La expansión de la energía eólica es una opción viable, dado su fuerte presencia en el estado. Texas puede inspirarse en el éxito de estados como Iowa y Dakota del Sur, donde la energía eólica cubre entre el 59% y el 63% de la generación eléctrica. Además, mirando al futuro, sería beneficioso considerar el potencial de la energía solar, como lo muestran ejemplos de estados y países con una destacada participación de esta tecnología, como Nevada y España. Asimismo, Texas debería aprender de países con alta generación nuclear como Francia y Estados Unidos, donde esta tecnología representa una porción significativa de su mix eléctrico. La expansión de la energía nuclear y solar podría ser clave para un suministro eléctrico más limpio y seguro.
Historia
La historia reciente de la electricidad baja en carbono en Texas muestra un crecimiento constante, especialmente desde fines de la década de 2000. Desde 2008 hasta 2024, la energía eólica ha mostrado aumentos significativos año tras año, con destacados incrementos en 2016 y 2022, año en el que la generación eólica aumentó en 15,3 TWh. Asimismo, la energía solar ha ganado relevancia, especialmente desde 2020, con un notable incremento de 11,4 TWh en 2024. Este progreso evidencia el compromiso y potencial de Texas para seguir avanzando hacia una matriz energética más limpia y sostenible, aunque es imprescindible continuar impulsando estas tecnologías para asegurar un futuro energético verde y resiliente.