En Texas, la distribución del consumo de electricidad en el período comprendido entre junio de 2024 y mayo de 2025 muestra una prevalencia de los combustibles fósiles, con un 62.7% de la generación total proviniendo de este tipo de fuente de energía. En particular, el gas representa la mitad de este porcentaje, acaparando el 50.25% del total, mientras que el carbón contribuye con un 11.99%. Por otro lado, las fuentes de energía bajas en carbono constituyen un significativo 37.28% de la generación total, con la energía eólica siendo la mayor contribuyente dentro de este grupo, al representar casi una cuarta parte con un 21.83%. La energía solar contribuye con un 8.11% y la energía nuclear aporta un respetable 7%, lo que indica una diversidad en las fuentes limpias aunque haya espacio para su expansión.
¿Está creciendo la electricidad en Texas?
En relación al crecimiento del consumo eléctrico en Texas, los últimos datos señalan que ha habido un aumento modesto. En el año 2025, el consumo total de electricidad fue de 18,209 kWh por persona, marcando un incremento de 192 kWh por persona respecto al récord previo de 2024, que fue de 18,017 kWh por persona. Similarmente, el consumo de electricidad baja en carbono también ha mostrado un alentador incremento. Los últimos registros indicaron que se generaron 6,789 kWh por persona, superando el récord previo de 6,558 kWh por persona en el año 2024, reflejando así un aumento de 230 kWh por persona. Estos incrementos apuntan hacia un crecimiento sostenido en el uso de electricidad, especialmente proveniente de fuentes limpias.
Sugerencias
Para continuar ampliando la generación de electricidad baja en carbono en Texas, el enfoque podría dirigirse al refuerzo de sus ya robustas instalaciones eólicas, dada su significativa contribución actual. Tomando como ejemplo a Iowa y Dakota del Sur, donde la energía eólica representa más del 60% de su generación eléctrica, Texas podría beneficiarse de ampliar su capacidad eólica. Adicionalmente, se debería considerar la expansión de la energía solar, ya que los estados como Nevada y California han logrado cifras relevantes con casi un tercio y un quinto respectivamente de su generación total proveniente del sol. En términos de energía nuclear, prestando atención al éxito de Francia y Eslovaquia, donde una gran parte de su electricidad proviene de esta fuente, Texas puede explorar el potencial de aumentar la capacidad nuclear para una matriz energética más limpia y sustentable.
Historia
A lo largo de los años, Texas ha visto un crecimiento significativo en su capacidad de generación de electricidad baja en carbono, especialmente por medio de la energía eólica y solar. En los años 2008 a 2020, la energía eólica experimentó aumentos constantes, con saltos notables como el de 12.7 TWh en 2016. Recientemente, la capacidad solar ha mostrado un crecimiento impresionante, especialmente en 2024 con un incremento de 11.4 TWh. Aunque el crecimiento de la energía eólica fue menor en 2023 y 2024, con solo 5.1 TWh de incremento cada año, sigue siendo una parte crucial del entramado energético de Texas. Estos avances reflejan el compromiso del estado con la expansión de tecnologías limpias y subrayan la importancia de seguir impulsando estas iniciativas para combatir los impactos negativos de los combustibles fósiles.