En el período comprendido entre agosto de 2023 y julio de 2024, el consumo de electricidad en India muestra una clara dependencia de los combustibles fósiles, que representan más de tres cuartas partes del total, con el carbón como protagonista generando más del 70% de la electricidad. Aproximadamente una cuarta parte de la electricidad en India proviene de fuentes de energía baja en carbono. Dentro de este grupo, la energía hidroeléctrica contribuye con cerca del 7%, la energía solar con más del 6% y la eólica con casi el 5%. La generación a partir de gas y energía nuclear es mínima, contribuyendo con cerca del 3% y 2.5% respectivamente. Este panorama actual resalta la necesidad urgente de India de reducir su dependencia de los combustibles fósiles y aumentar su proporción de electricidad baja en carbono para mitigar los efectos adversos del cambio climático y mejorar la calidad del aire.
Para mejorar su generación de electricidad baja en carbono, India puede inspirarse en ejemplos de éxito internacional. Países como Francia y Eslovaquia dependen en gran medida de la energía nuclear, con más del 60% de su electricidad generada a partir de esta fuente limpia. Por otro lado, Dinamarca y Uruguay han destacado en el uso de energía eólica, alcanzando una proporción cercana al 60% y 36% respectivamente. Así, India podría incrementar significativamente su capacidad nuclear y eólica aprendiendo de estas experiencias. Además, dado su clima soleado, India tiene un potencial inmenso para expandir la energía solar, similar a países como Chile y Australia, que han logrado integrar con éxito más del 20% de energía solar en su mix eléctrico.
Históricamente, India ha experimentado altibajos en su camino hacia el desarrollo de electricidad baja en carbono. Desde finales de los años 80, la energía hidroeléctrica fue el principal motor del crecimiento, mostrando incrementos significativos durante los años 1988, 1998 y principios de los 2000. Sin embargo, también enfrentó contratiempos, como un notable descenso en 2012. Más recientemente, la energía solar ha mostrado un crecimiento impresionante, especialmente desde 2017, con aumentos sustanciales en 2018, 2022 y 2023. La energía eólica también incrementó significativamente en 2023. Sin embargo, la caída drástica en generación hidroeléctrica en 2023 subraya la volatilidad de depender en exceso de una sola fuente hidroeléctrica. Estos datos resaltan la importancia de una diversificación estratégica y de apostar por un mix energético que integre nuclear, solar y eólica para asegurar un suministro estable y limpio de electricidad en India.