En 2023, la generación de electricidad baja en carbono en Kenia alcanzó aproximadamente 11.47 TWh. De esta cantidad, más de la mitad, específicamente 6.04 TWh, provino de la energía geotérmica, mientras que la hidroeléctrica contribuyó con 2.7 TWh y la eólica con 2 TWh. En comparación con el promedio global de consumo de electricidad de 432 vatios/persona, Kenia se encuentra significativamente por debajo, lo cual puede tener repercusiones en el desarrollo industrial, la calidad de vida y el acceso a servicios básicos. Los niveles bajos de generación eléctrica pueden dificultar la competitividad económica y el desarrollo social del país.
Kenia puede aumentar su generación de electricidad baja en carbono expandiendo su capacidad actual de energía eólica, dada su ya significativa contribución. Mirando a otras naciones, Kenia podría aprender de China, que generó 886 TWh con energía eólica, e India, que produjo 82 TWh. Además, países como Brasil han demostrado ser exitosos con la energía eólica al generar 96 TWh. Al fomentar políticas similares y atraer inversiones en energías limpias, Kenia puede replicar estos éxitos y reducir su dependencia de combustibles fósiles, mitigando así los efectos del cambio climático y la contaminación del aire.
La historia de la electricidad baja en carbono en Kenia muestra fluctuaciones importantes. En la década de 1980, especialmente en 1988, la energía hidroeléctrica aumentó en 0.5 TWh, aunque en 1999 y 2000 sufrió caídas de -0.8 y -1.1 TWh, respectivamente. La década de 2000 presentó una recuperación gradual, destacando el 2010 con un incremento de 1.3 TWh en hidroeléctrica. La energía geotérmica comenzó a ver incrementos significativos en 2014 con 1.2 TWh y en 2015 con 1.3 TWh. La energía eólica también ha crecido, especialmente en 2019 con un aumento de 1.2 TWh. Estos incrementos en las décadas recientes subrayan un compromiso hacia las energías limpias.