Maine ha mostrado un fuerte compromiso hacia la producción de electricidad baja en carbono, con casi el 67% de su electricidad proveniendo de fuentes limpias. La energía eólica y la hidroeléctrica son protagonistas, aportando más de un cuarto y una quinta parte del total, respectivamente. A esto se suma la energía solar, que representa casi un 8%, y los biocombustibles, que aportan aproximadamente un 11%. En cambio, los combustibles fósiles aún tienen una participación significativa, representando un poco más del 31%, con el gas como el principal contribuyente. Esta mezcla energética, en gran parte limpia, es un paso positivo hacia la sostenibilidad, pero aún hay trabajo por hacer para reducir aún más la dependencia de los combustibles fósiles.
¿Está creciendo la electricidad en Maine?
En términos de consumo de electricidad, Maine ha experimentado una notable disminución desde su pico en 2004. El consumo actual se sitúa en 9792 kWh por persona, una caída significativa de 4746 kWh desde hace dos décadas. Sin embargo, la generación de electricidad baja en carbono está rompiendo records, alcanzando los 6548 kWh por persona, superando el récord anterior de 6400 kWh en 2008. Esta evolución muestra un aumento en la adopción de fuentes de energía más limpias, aunque la caída general en el consumo de electricidad es algo preocupante, especialmente ante la creciente demanda mundial de energía para sostener el avance tecnológico y la electrificación.
Sugerencias
Para avanzar hacia un futuro más limpio, Maine podría beneficiarse al expandir su capacidad eólica, dado que ya representa una parte considerable de su generación de electricidad de baja emisión. Además, Maine podría tomar inspiración de estados como Iowa y Dakota del Sur, donde la energía eólica contribuye con más del 50% del suministro eléctrico. En cuanto a la energía solar, mirando a regiones como Líbano, donde la solar representa el 31%, es evidente que hay un gran potencial de crecimiento para este tipo de generación en Maine. Aunque la energía nuclear no está actualmente en el mix energético de Maine, las experiencias de países como Francia y estados como New Hampshire muestran lo valioso que puede ser incluir esta fuente limpia en su cartera energética.
Historia
El historial de generación de energía baja en carbono de Maine refleja tanto avances como contratiempos a lo largo de las últimas dos décadas. En 2005, hubo un aumento significativo en la generación con la energía hidroeléctrica y los biocombustibles. Sin embargo, años como 2007 y 2010 vieron una disminución en la generación hidroeléctrica. Durante la segunda mitad de la década de 2010, el viento comenzó a jugar un papel más dominante, creciendo constantemente en 2016 y 2017. Los altibajos de la generación hidroeléctrica, con variaciones anuales, resaltan los desafíos de depender demasiado de una sola fuente de energía limpia. Además, 2024 ha mostrado señales positivas, con aumentos tanto en solar como en eólica, lo cual es alentador para el futuro de la electricidad limpia en Maine.