En el periodo que abarca desde septiembre de 2024 hasta agosto de 2025, la situación actual del consumo de electricidad en Filipinas refleja una dependencia significativa de fuentes de energía convencionales y fósiles, con más de tres cuartas partes, específicamente un 75.32%, provenientes de combustibles fósiles. El carbón se posiciona como el mayor contribuyente dentro de esta categoría, representando un notable 58.35%, seguido por el gas que aporta un 16.47%. En contraste, la generación de electricidad baja en carbono representa un 24.68% del total, donde la energía hidroeléctrica es la que más contribuye dentro de esta categoría con casi un 11%. La energía geotérmica también aporta un 8.17%, mientras que la solar participa con un 3.52% y los biocombustibles apenas superan el 1%.
Las fuentes de datos utilizadas en esta página incluyen EIA, Ember, IEA y World Bank. Más sobre fuentes de datos →
¿Está creciendo la electricidad en Filipinas?
En cuanto al crecimiento del consumo de electricidad en Filipinas, parece haber un ligero aumento. En 2025, cada persona consumió 1051 kWh de electricidad, frente al récord anterior de 1045 kWh/persona en 2024, lo que implica un modesto aumento de 6 kWh/persona. Destacablemente, la generación de electricidad baja en carbono también ha aumentado hasta 259 kWh/persona, superando su récord anterior en el año 2000, que era de 244 kWh/persona, logrando un incremento significativo de 15 kWh/persona. Este crecimiento, tanto en el consumo total como en la electricidad baja en carbono, es motivo de satisfacción, aunque un ritmo de progresión más acelerado sería ideal para fomentar un modelo energético más sostenible.
Sugerencias
Para incrementar la generación de electricidad baja en carbono, Filipinas podría aprender de las experiencias de otras regiones que han tenido éxitos notables en la implementación de energías limpias. Por ejemplo, el uso de energía solar, como el practicado en países como Chile (24% solar) y Grecia (21% solar), podría ser estudiado e implementado en Filipinas debido a sus similitudes climáticas. Adicionalmente, la expansión de la energía nuclear podría ser otra opción viable. Países como Francia y Eslovaquia, donde la energía nuclear representa el 69% y el 67% de la generación eléctrica respectivamente, muestran cómo puede ser una fuente importante de energía baja en carbono. Estos ejemplos subrayan el potencial de la energía solar y nuclear como pilares del futuro energético de Filipinas, reduciendo la dependencia de los contaminantes combustibles fósiles y mitigando sus impactos negativos en el cambio climático y la contaminación del aire.
Historia
En la historia de la electricidad baja en carbono en Filipinas, ha habido fluctuaciones significativas, especialmente en la generación hidroeléctrica. Durante los años ochenta, se observó un crecimiento paulatino, notablemente en 1984 y 1988. Sin embargo, la década de los noventa experimentó altibajos, con reducciones en 1997 y 1998, aunque hubo una recuperación en 1999. La energía geotérmica mostró un aumento en 1998 y 1999, pero sufrió un descenso en 2001. El siglo XXI presenta un panorama de inestabilidad, especialmente en la hidroeléctrica, con altibajos constantes. Sin embargo, la energía solar ha comenzado a tomar protagonismo recientemente, como lo demuestra el incremento de 1.2 TWh en 2024, apuntando hacia un futuro más limpio y prometedor.