Con base en nuestro modelo de pronóstico y utilizando los datos reales para los primeros nueve meses del año 2023 y los datos pronosticados para los tres meses restantes, la actual composición de la electricidad en Irlanda favorece en gran medida las energías fósiles. Cerca de la mitad (48,18%) de la electricidad proviene de fuentes de energía fósil y algo más del cuarenta por ciento de esta proporción es generada por el gas. Por otro lado, la energía eléctrica de bajo carbono en Irlanda representa un poco más del tercio (40,34%), de la cual la energía eólica aporta la mayoría (34,38%). Las importaciones netas contribuyen a alrededor del 11,48% de la electricidad, mientras que las centrales hidroeléctricas y los biocombustibles contribuyen poco (3,34% y 2,14% respectivamente). Queda claro que la generación de energía eléctrica de bajo carbono en Irlanda tiene un largo camino por recorrer para superar a las fuentes de energía fósil.
Para aumentar la generación de electricidad baja en carbono, Irlanda debería considerar expandir sus proyectos de energía eólica. Hasta ahora, estas tecnologías de bajo carbono ya están generando grandes cantidades de electricidad en Irlanda. También puede ser valioso aprender de los éxitos de países similares. Por ejemplo, Dinamarca ha logrado generar el 59% de su electricidad a través de la energía eólica, que es una cifra impresionante. Además de la energía eólica, Irlanda podría considerar invertir en energía nuclear. Francia y Eslovaquia han tenido un tremendo éxito con la energía nuclear, aportando el 66% y el 63% de su generación total de electricidad, respectivamente. Sin embargo, Irlanda tendría que sopesar cuidadosamente las ventajas y desventajas de la energía nuclear antes de embarcarse en tal proyecto.
Respecto a la historia de la generación de electricidad de bajo carbono en Irlanda, las cifras sugieren que la energía eólica ha jugado durante bastante tiempo un papel importante en la producción de energía de bajo carbono en dicho país. Desde 2005, la contribución de la energía eólica a la generación total de electricidad ha estado creciendo de manera constante, con aumentos significativos en 2011, 2015, 2018 y 2020. Sin embargo, se observó una notable caída en 2021. Además, es relevante destacar que la generación de electricidad a través de los biocombustibles ha estado fluctuando, sin un patrón claro. En 2023, la generación de energía hidroeléctrica aumentó mientras que la generación a partir de biocombustibles disminuyó. A pesar de estos altibajos, el empeño de Irlanda en aumentar la producción de energía de bajo carbono es evidente a lo largo de los años y, sin duda, continuará en el futuro.