En 2024, el consumo de electricidad en Bulgaria muestra una clara inclinación hacia las fuentes de electricidad baja en carbono. Más de dos tercios de la electricidad proviene de fuentes limpias, con la energía nuclear representando una parte significativa, alcanzando casi el 42%. La energía solar contribuye con un considerable 14% y la energía hidroeléctrica aporta alrededor de un 8%. La energía eólica y los biocombustibles tienen una presencia más modesta, aportando cerca del 4% cada uno. Por otro lado, los combustibles fósiles, incluidos el carbón y el gas, componen un poco más de un cuarto del total, con el carbón solo representando un 22%. La tendencia hacia la electricidad baja en carbono en Bulgaria es un paso positivo hacia la reducción de emisiones y la lucha contra el cambio climático.
Para incrementar aún más la generación de electricidad baja en carbono, Bulgaria puede beneficiarse de la expansión de sus capacidades nuclear y solar. Mirando ejemplos internacionales, Francia, con el 68% de su electricidad proveniente de la energía nuclear, puede servir como modelo sobre cómo maximizar la eficiencia y capacidad nuclear. De manera similar, países como Líbano, que genera el 31% de su electricidad a partir de la solar, muestran el potencial de la expansión solar. Por otro lado, Bulgaria podría observar el éxito de Dinamarca, cuya electricidad proviene en un 52% de la energía eólica, para futuras inversiones en esta área. La transferencia de conocimientos de estos países puede inspirar políticas efectivas para un futuro bajo en carbono en Bulgaria.
Históricamente, la electricidad baja en carbono en Bulgaria ha tenido un desarrollo tumultuoso, especialmente con respecto a la energía nuclear. En la década de 1980 y principios de los 90, el país experimentó un aumento notable en la capacidad nuclear, con incrementos de hasta 3.6 TWh. Sin embargo, desde principios de los 2000, se observaron disminuciones significativas, como una caída de 4.9 TWh en 2007, lo que indica problemas a nivel de planificación o políticas. En años más recientes, la energía hidroeléctrica ha tenido fluctuaciones, pero con intentos de recuperación, como el aumento de 2 TWh en 2021. La expansión solar reciente, con un incremento de 1.8 TWh en 2024, refuerza el compromiso de Bulgaria con la electricidad baja en carbono, compensando, en parte, los desafíos que han enfrentado en el sector nuclear.