En el periodo de doce meses comprendido entre junio de 2024 y mayo de 2025, el estado de Montana ha demostrado un compromiso notable con la generación de electricidad baja en carbono. Más de la mitad de la electricidad proviene de fuentes limpias, alcanzando un 57.34%. La energía hidroeléctrica es la mayor fuente de electricidad baja en carbono, generando cerca de un 33% del total, mientras que la energía eólica aporta casi un 23%. Sin embargo, aproximadamente un 42% de la electricidad todavía se obtiene de combustibles fósiles, siendo el carbón el principal, con un 36%. Esto demuestra que Montana tiene una base estable de generación eléctrica limpia, aunque todavía depende en cierta medida de los combustibles fósiles.
¿Está creciendo la electricidad en Montana?
A pesar del enfoque hacia bajas emisiones de carbono, el consumo eléctrico en Montana aún no ha alcanzado sus niveles históricos, lo que plantea la cuestión de si se está produciendo un crecimiento en la demanda de electricidad. En 2025, cada persona consumió 23,589 kWh de electricidad, lo que representa una reducción considerable en comparación con el pico de 30,353 kWh por persona en 2008. Además, el récord anterior de generación de electricidad baja en carbono por persona, establecido en 2011, todavía se mantiene un poco superior al actual. A pesar de la impresionante generación limpia, Montana necesita "alumbrar" su camino hacia niveles de consumo y generación eléctrica más altos para satisfacer las demandas futuras.
Sugerencias
Para aumentar la generación baja en carbono, Montana podría considerar la expansión de sus capacidades existentes en energía eólica, dado que ya juega un papel significativo en la matriz energética del estado. Un posible camino a seguir es aprender de regiones y países exitosos en energía eólica, como Iowa y Dakota del Sur, que generan más del 60% de su electricidad mediante energía eólica. Además, incorporar energía nuclear en la ecuación podría ser clave, ya que países como Francia y estados como Nuevo Hampshire generan más de la mitad de su electricidad nuclearmente. Combinando estas estrategias, Montana podría reducir aún más su dependencia de los combustibles fósiles, promoviendo una transición hacía un modelo de electricidad más limpio.
Historia
Históricamente, la electricidad baja en carbono en Montana ha tenido altibajos, sobre todo debido a cambios en la generación hidroeléctrica. En la primera década del siglo XXI, la energía hidroeléctrica vio incrementos notables en 2005 y 2011, con un aumento respetable de 0.7 y 3.2 TWh respectivamente. Sin embargo, también se enfrentó a disminuciones significativas, como las de 2007, 2012 y 2013, lo que sugiere una inestabilidad en la producción. En los últimos años, ha habido esfuerzos para equilibrar estas fluctuaciones mediante el aumento de la generación eólica, destacándose un incremento de 1.3 TWh en 2024, lo que indica una perspectiva positiva hacia el fortalecimiento de la generación baja en carbono en Montana.