En 2021, la producción total de electricidad en Jamaica fue mayormente de combustibles fósiles, conformando alrededor de 3.64 TWh, y el gas proporcionó casi 1.49 TWh. En contraste con el promedio global de 410 watts por persona, Jamaica tiene una generación de electricidad bastante baja. Esta situación puede tener efectos importantes, tales como la falta de disponibilidad suficiente de energía para consumo e industrial, así como una mayor dependencia de las importaciones de energía. Además, altas proporciones de generación de energía a partir de combustibles fósiles pueden contribuir al cambio climático debido a la emisión de gases de efecto invernadero.
Para aumentar la generación de electricidad baja en carbono, Jamaica podría aprender de algunos países con condiciones similares. Por ejemplo, Brasil, un país tropical como Jamaica, ha tenido éxito en la generación de electricidad a partir del viento y la energía solar, proporcionando 94 TWh y 49 TWh respectivamente. Países como España y Australia también han demostrado ser líderes en energía eólica y solar, coincidiendo con el enorme potencial de Jamaica para estas formas de energía baja en carbono. La adopción de tecnologías de energía eólica y solar a gran escala podría ayudar a Jamaica a mejorar su balance energético y a reducir su dependencia de los combustibles fósiles.
En cuanto a la historia de la electricidad baja en carbono en Jamaica, hubo ligeros aumentos en la generación de biocombustibles en la década de 1970, seguidos de varias fluctuaciones en las décadas siguientes, con una tendencia general a la disminución a partir de 1990. La energía eólica comenzó a aparecer en el mix energético de Jamaica en 2011, con un pequeño incremento en 2016, mientras la energía solar no empezó a ser relevante hasta 2019. Sin embargo, la generación de electricidad a partir de estas fuentes de energía sigue siendo mínima, lo que indica la necesidad de Jamaica de expandir su capacidad de generación de energía baja en carbono y diversificar su mix energético.