En el período de junio de 2023 a mayo de 2024, la generación de electricidad en Singapur muestra un predominio casi total de combustibles fósiles, con más del 98% de la electricidad generada a partir de estas fuentes, de las cuales casi toda proviene del gas. En marcado contraste, la proporción de electricidad baja en carbono es de apenas 2%. De este pequeño porcentaje, toda la generación de electricidad baja en carbono proviene de la energía solar. Este panorama destaca una fuerte dependencia de los combustibles fósiles, resultando en un perfil de generación eléctrica que contribuye a las emisiones de gases de efecto invernadero y al cambio climático.
Para aumentar la generación de electricidad baja en carbono, Singapur podría aprender de países que han tenido éxito en integrar energías limpias en su matriz eléctrica. Francia, por ejemplo, genera casi dos tercios de su electricidad a partir de fuentes nucleares, lo que destaca la potencialidad de la energía nuclear en la transición hacia una producción energética más sustentable. La experiencia de Dinamarca, donde la energía eólica representa casi el 60% de su electricidad, también ofrece una valiosa lección sobre cómo aprovechar su potencial eólico. Singapur, que comparte un espacio geográfico limitado similar al de algunos de estos países, podría considerar seriamente estas estrategias, especialmente desarrollando más la energía solar y evaluando la viabilidad de introducir energia nuclear para diversificar sus fuentes energéticas y reducir las emisiones de carbono.
La historia de la electricidad baja en carbono en Singapur empieza modestamente con la incorporación de biocombustibles a finales del siglo XX y principios del XXI. Durante los años 1980 a 2000, el país experimentó incrementos graduales en biocombustibles. Sin embargo, es más recientemente, durante la última década, que el crecimiento se ha orientado hacia la energía solar. Desde 2016, la producción de electricidad solar ha tenido aumentos continuos, con pasos importantes en 2022 y 2023. Este cambio hacia la solar refleja un avance hacia tecnologías más limpias y subraya el potencial de Singapur para continuar expandiendo sus capacidades de generación de electricidad baja en carbono en los años venideros.