Durante el período comprendido entre junio de 2024 y mayo de 2025, el consumo de electricidad en Nuevo Hampshire muestra un claro predominio de fuentes de energía baja en carbono. Este tipo de energía representa poco más del 70% del total de la electricidad generada en la región, encabezado por la energía nuclear que constituye más de la mitad del total, con casi 55%. La energía hidroeléctrica y los biocombustibles también tienen una presencia notable, aportando casi 9% y cerca de 5%, respectivamente. La energía eólica, aunque aporta una pequeña fracción con aproximadamente 3%, complementa este panorama de electricidad limpia. Por otro lado, los combustibles fósiles todavía contribuyen con un poco más del 28% al consumo de electricidad, siendo la mayor parte generada por gas con cerca de 26%, y una porción mucho menor por carbón con aproximadamente 2%.
¿Está creciendo la electricidad en Nuevo Hampshire?
En términos de crecimiento del consumo de electricidad, Nuevo Hampshire ha mostrado una reducción significativa en comparación con su récord histórico. En 2025, el consumo total de electricidad por persona fue de 12,398 kWh, lo que representa una disminución de 6,447 kWh en comparación con el máximo alcanzado en 2005. La generación de electricidad baja en carbono también ha disminuido desde su récord en 2013, con una producción actual de 8,800 kWh por persona, reflejando una caída de 1,785 kWh. Estos descensos son preocupantes, ya que indican una falta de crecimiento general que podría comprometer la capacidad futura de electrificación y el avance hacia un sistema más limpio.
Sugerencias
Para aumentar la generación de electricidad baja en carbono, Nuevo Hampshire debería considerar seriamente la expansión de su capacidad nuclear, dado su gran aporte actual. Mirando ejemplos exitosos, la región podría beneficiarse al analizar modelos como el de Francia, donde la energía nuclear constituye el 69% de su matriz eléctrica. Además, países con alta penetración de energía solar, como Nevada con un 29%, podrían ofrecer lecciones valiosas en cuanto a la implementación de tecnologías solares. Adaptar estas estrategias en combinaciones de energía solar y nuclear podría ayudar a Nuevo Hampshire a reducir más su dependencia de los combustibles fósiles y asegurar un suministro energético más sostenible a largo plazo.
Historia
Históricamente, la producción de electricidad baja en carbono en Nuevo Hampshire ha experimentado fluctuaciones importantes. En los primeros años de la década de 2000, se observó una caída significativa en la producción nuclear, especialmente en 2005 y 2008, con descensos de 0.7 y 1.4 TWh, respectivamente. Sin embargo, a partir de 2010, se vieron aumentos notables, como el de 2.1 TWh en 2010, y 2.7 TWh en 2013. A pesar de estos incrementos, la tendencia ha sido inestable, con otros años con caídas, como en 2011 y 2023. Estos altibajos en la generación nuclear son preocupantes y sugieren la necesidad de una estrategia más decidida y estable para expandir las fuentes de energía baja en carbono, fundamental para el futuro energético de Nuevo Hampshire.