Actualmente, en Kuwait el consumo energético es predominantemente dependiente de los combustibles fósiles, ya que el gas representa más del 58% y la energía proveniente de fuentes bajas en carbono es inexistente. Esto significa que toda su matriz energética depende de fuentes de combustible fósil, un hecho preocupante si consideramos las emergentes necesidades medioambientales de reducir las emisiones de gases de efecto invernadero y luchar contra el cambio climático.
Tomando en cuenta la experiencia de otros países, Kuwait podría aumentar su generación de electricidad baja en carbono a través de la implementación de energía nuclear y energía eólica. Por ejemplo, Francia y Eslovaquia generan más del 60% de su electricidad a partir de energía nuclear. Además, países como Dinamarca y Alemania han demostrado con éxito la implementación de energía eólica, representando casi el 60% y el 30% de su generación de electricidad respectivamente. Considerando que Kuwait es un país con amplios desiertos y oportunidades para el desarrollo de energía nuclear, podría aprender de estos casos de éxito y desarrollar infraestructura para la generación de energía nuclear y energía eólica.
En cuanto a la historia de la electricidad baja en carbono en Kuwait, hasta hace poco, el uso de energías limpias era casi inexistente. Durante la última década, la producción de energía eólica y solar siempre ha sido prácticamente nula. No fue hasta el año 2022 que Kuwait comenzó a experimentar con la energía solar, logrando una generación de 0.2 TWh, un hito importante en la historia del país. Sin embargo, hasta ahora la energía eólica sigue sin ser explotada, lo que indica que todavía hay mucho margen para el crecimiento y la diversificación de la matriz energética del país.