En Barbados, el consumo de electricidad en el año 2022 se caracterizó por una abrumadora dependencia de los combustibles fósiles, que representaron cerca del 93% de la electricidad generada. Dicho consumo incluye aproximadamente un 3% de gas. Por otra parte, la producción de electricidad baja en carbono, exclusivamente de fuentes solares, constituyó solo el 7% del total. Esta distribución resalta una clara dominancia de las fuentes fósiles sobre las fuentes de energía limpias.
Para aumentar la generación de electricidad baja en carbono, Barbados puede aprender de países que han tenido éxito en la integración de diferentes tipos de energía limpia. Uruguay, por ejemplo, genera el 36% de su electricidad de fuentes eólicas, mientras que Grecia y Chile han avanzado significativamente en la incorporación de energía solar con porcentajes de 22% y 21%, respectivamente. La diversificación es clave; Barbados podría considerar no solo expandir su capacidad solar, sino también invertir en infraestructura para energía eólica. La cooperación con países que han desarrollado con éxito estas tecnologías podría ser beneficiosa en términos de transferencia de conocimientos y tecnologías.
La historia de la electricidad baja en carbono en Barbados muestra una notable estabilidad en la última década, sin cambios significativos año tras año entre 2014 y 2022 en la generación solar, permaneciendo en cero TWh. La falta de crecimiento en este sector resalta una necesidad urgente de nuevas políticas y estrategias para impulsar la producción de energía limpia. Invertir en tecnologías de energía eólica y solar, aprendiendo de países con condiciones similares y éxitos probados, será clave para un futuro más sostenible y menos dependiente de combustibles fósiles.