En Yemen, el consumo de electricidad en 2022 provino casi por completo de combustibles fósiles, con 2.35 TWh generados a partir de estos recursos. La generación de electricidad baja en carbono en Yemen es prácticamente nula. Evaluando el consumo total de electricidad per cápita, Yemen está significativamente por debajo del promedio mundial de 3638 watts/persona, lo que significa que muchos yemeníes enfrentan un acceso muy limitado a la electricidad. Estas bajas tasas de generación eléctrica pueden obstaculizar el desarrollo económico, la educación y el bienestar general, además de continuar contribuyendo al cambio climático y la contaminación atmosférica.
Para abordar este tema, Yemen podría centrarse en aumentar la generación de electricidad baja en carbono, aprovechando al máximo la energía solar, ya que el país cuenta con un alto índice de irradiación solar. Observando ejemplos exitosos, Yemen podría aprender de países como la India y Australia, que han expandido exitosamente su generación solar a 128 TWh y 50 TWh respectivamente. Además, países como Brasil han conseguido incrementar su generación eólica a 102 TWh, lo cual también podría servir de inspiración para Yemen, debido a que comparte similitudes climáticas y geográficas con algunos de estos países.
Históricamente, la generación de electricidad baja en carbono en Yemen, particularmente la solar, no ha mostrado un crecimiento constante. Desde 2008 hasta 2022, la expansión fue mínima, con solo un humilde crecimiento en 2015 y 2018, donde se observaron incrementos de 0.1 TWh y 0.3 TWh respectivamente. Este patrón discontinuo sugiere que ha habido poco compromiso o inversión en el desarrollo de la energía solar en el país. Para mejorar su situación energética, Yemen necesita implementar políticas sólidas y asegurar inversiones significativas en tecnologías limpias, como la solar, para garantizar un acceso sostenible a la electricidad en el futuro.