En 2023, el consumo de electricidad en el Líbano muestra una mezcla casi equilibrada entre fuentes de energía de combustibles fósiles y bajas en carbono. Más de la mitad proviene de combustibles fósiles, alrededor del 52.65%, mientras que las energías bajas en carbono constituyen el 47.35% restante. Dentro de las energías bajas en carbono, la energía solar representa casi un tercio de la electricidad generada, con 30.97%, y la energía hidroeléctrica añade un 15.49%. Esta combinación indica una significativa dependencia de las fuentes de combustibles fósiles, aunque hay un crecimiento notable en la adopción de tecnologías limpias, especialmente solares.
¿Está creciendo la electricidad en Líbano?
Sin embargo, el panorama general del consumo de electricidad en el Líbano es preocupante, ya que la electricidad per cápita ha disminuido significativamente. En 2023, la electricidad consumida fue de apenas 783 kWh por persona, una disminución considerable desde el récord anterior de 3741 kWh por persona en 2019. Aunque hay un leve aumento en la generación de electricidad baja en carbono, con un incremento de 24 kWh por persona desde 2022, el margen es insuficiente para compensar la caída general en el consumo total de electricidad. Este descenso en el consumo general es un indicativo preocupante de un estancamiento o declive en la infraestructura o capacidad de generación.
Sugerencias
Para aumentar la generación de electricidad baja en carbono, el Líbano debería expandir su capacidad solar, que ya muestra un gran potencial. Además, puede aprender de países que han incorporado con éxito energías limpias. Países como Dinamarca y Uruguay han logrado generar más del 20% de su electricidad a partir de energía eólica, un recurso que, junto a la solar, podría ser explorado por el Líbano. El modelo danés, con un 52% de energía generada por el viento, demuestra cómo se puede confiar en fuentes renovables efectivas de energía baja en carbono para satisfacer la demanda eléctrica, sirviendo como una inspiración para economías similares.
Historia
La historia de la electricidad baja en carbono en el Líbano ha mostrado altibajos a lo largo de las décadas, especialmente en la producción hidroeléctrica. En los años 1980, la generación hidroeléctrica sufrió caídas, como la de 1982 con -0.2 TWh. Después de pequeñas fluctuaciones en los años 90, hubo crecimientos esporádicos como en 2002 y 2003, aunque también declives como en 2004 y 2006. El siglo XXI ha sido testigo de aumentos notables, especialmente desde 2019, con un aumento en 2022 gracias al solar, que añadió 1 TWh. Esta tendencia hacia la adopción de energía solar debe continuar acelerándose para contrarrestar los desafíos energéticos futuros.
Electrificación
Estimamos el grado de electrificación comparando las emisiones de electricidad y energía total. Más sobre metodología.